La Red Nacional en Defensa de los Derechos Humanos (RNDDH) denunció que al menos 300 personas, la mayoría de ellas civiles, murieron durante los enfrentamientos entre las pandillas en la capital de Haití, informó ‘Le Nouvelliste’.
“El balance de la guerra de pandillas en Cité Soleil asciende a unos 300 muertos y 160 heridos, confió el director ejecutivo de la RNDDH, Pierre Espérance”, de acuerdo con el rotativo.
El defensor de los DDHH deploró que la mayoría de las víctimas son las personas más vulnerables, mujeres y niños, como en las masacres ocurridas en el país desde 2018, y volvió a culpar a las autoridades de turno por presuntamente apoyar a los grupos armados en detrimento de la población.
“Es el poder en el lugar el que da los medios a las bandas del G9 y aliados. ¿Por qué? Quieren desalojar a Ti Gabriel para permitir que este grupo tenga el control de la ciudad. Este es el origen de la guerra. Esta misma política iniciada bajo el reinado del expresidente Jovenel Moise, resulta en atacar a los habitantes de los barrios desfavorecidos para colocarlos bajo el dominio de las pandillas en la perspectiva electoral”, valoró Espérance.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos denunció que entre el 8 y el 12 de julio al menos 234 personas fallecieron o resultaron heridas como consecuencia de la guerra de las pandillas en la comuna más desfavorecida de la capital.
Las hostilidades tienen lugar en Cité Soleil, un extenso barrio pobre que aumentó su población durante los años de la dictadura de Jean Claude Duvalier (1971-1986), cuando se instalaron los parques industriales. Actualmente es la comuna pobre más desfavorecida del país y una de las mayores de la región.
La ONU también reveló que la mayoría de las víctimas no están relacionadas con las bandas, “sino que fueron blanco de pandilleros”, y deploraron las numerosas denuncias de violencia sexual.
De acuerdo con la oficina del Alto Comisionado, de enero a junio se registraron 934 asesinatos y 680 secuestros, lo cual demuestra el empeoramiento de la violencia en Puerto Príncipe y el aumento de las violaciones de los derechos humanos contra la población local.
